Sello: Music PlusLos años están sentando bien a los RSK. Su debut discográfico, editado hace ahora dos años bajo el título de
“Corriendo las calles”, era un correcto pero discreto ejercicio de rock urbano. Sonaba bien, pero faltaba algo de chispa a esos temas que les hicieran destacar por méritos propios y alejarse del sonido que cientos de grupos practican hacinados en sus locales de ensayo. Ahora estos cinco tarraconenses regresan con
“Aunque no pueda respirar”, un disco en el que muestran su evolución y se alejan del sonido de bandas como Barricada para mostrarse en un sonido más cercano a La Fuga.
Bajan sus revoluciones, pero sobre todo este cambio se manifiesta en la limpieza de su sonido, logrado a partes iguales por el hecho de alejarse de la omnipresencia de la distorsión, y por el factor clave que es haberse puesto en manos de los estudios
Sonido XXI. Ciertamente, este estudio está marcando cada vez más su impronta en muchos de los grupos que últimamente están pasando por sus salas –de hecho, al margen del sonido, recursos como acabar un tema del disco a modo de grabación improvisada en una fiesta comienzan a volverse repetitivos entre las últimas referencias de su catálogo. Su vocalista se adapta con éxito a estos nuevos temas, moderando su voz y sonando ésta vigorosa en los tramos más acústicos. La mayor presencia de arreglos, coros y teclados aporta al disco una cierta elegancia. A nivel de colaboraciones, tuvieron la oportunidad de contar en el estudio con dos nombres pesados de sus influencias:
El Drogas -de
Barricada-, y
Rulo -de
La Fuga, formación con la que han compartido unos cuantos conciertos- en canciones que suenan como hechas a medida para ambos y muy especialmente en el caso del cántabro.
Han cambiado su sonido volviéndose más melódicos, y ciertamente con ello han ganado bastantes enteros. Resta ver por donde les llevarán sus próximos pasos musicales, pero lo que tenemos entre manos es una apuesta en firme.
Artículo escrito por
Héctor Mainar
Comentarios
polol -
02 de julio de 2009
olag